La RCP o reanimación cardiopulmonar es uno de los primeros auxilios que más vidas salva en el mundo. Esta maniobra de reanimación se aplica cuando la persona no respira y su corazón deja de latir. Por ello es muy importante saber cuándo aplicarla y realizarla correctamente.
Sigue leyendo porque te contamos la importancia de esta maniobra. Además, te explicamos cómo realizar la reanimación cardiopulmonar en adultos y niños paso a paso. Si quieres ampliar tus conocimientos sobre primeros auxilios, echa un vistazo a nuestro Máster en Primeros Auxilios para Transportes de Pasajeros
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La importancia de la RCP
Cada año, más de 6 millones de personas en el mundo sufren un paro cardíaco sin previo aviso. Una persona que está sufriendo una parada cardiorespiratoria no responde, reacciona ni respira. Por ello, con la maniobra RCP se busca restablecer el funcionamiento de los pulmones y el corazón.
Con ella se debe lograr que el flujo sanguíneo de la víctima no se detenga cuando deja de respirar. De esta manera, se pueden minimizar los daños irreversibles que provoca la falta de riego sanguíneo en el cerebro e incluso evitar la muerte. Cabe destacar que este primer auxilio no se aplica de la misma manera en adultos que en niños.
En situaciones de emergencia y según el estado de la víctima se debe aplicar la reanimación cardiopulmonar mientras esperamos la llegada de los servicios sanitarios. Esta actuación es clave para salvar la vida de una persona en casos de ahogamiento, ataque cardíaco o de descarga eléctrica. En definitiva, es muy importante que la sociedad se forme en primeros auxilios para saber cómo actuar en situaciones límite.
Cómo aplicar la RCP en adultos
Como sabrás, la reanimación cardiopulmonar consta de dos fases. Primero deben realizarse las compresiones torácicas. Con ellas se mantiene la circulación de la sangre. Después hay que hacer la respiración boca a boca. Gracias a ella se provee de oxígeno a la víctima.
Para realizar las compresiones cardiacas debes seguir estos pasos:
- Coloca la palma de una mano sobre el esternón de la víctima. En caso de ser una mujer deberás colocarla entre los pechos. Si es hombre, colócala entre los pezones.
- Pon la palma de la otra mano sobre la primera.
- Coloca tu cuerpo directamente sobre las dos manos.
- Sitúa los brazos perpendiculares al cuerpo y estira los codos.
- Uno tras otro, aplica 30 movimientos de las manos contra el esternón. Las compresiones deben ser rápidas y fuertes.
Después de realizar las 30 compresiones, debes hacer 2 respiraciones boca a boca. Si el pecho de la víctima se hincha, estás haciéndolo correctamente. Sigue con el mismo procedimiento hasta que vuelva a respirar espontáneamente o lleguen los servicios de emergencia.
La reanimación cardiopulmonar en niños
Como hemos mencionado anteriormente, la maniobra de reanimación es distinta en los menores de 9 años. Al ser más vulnerables, las compresiones torácicas no deben ser fuertes ya que podemos causarles daño. Por ello se realizan con el dedo medio y anular en la parte baja del esternón. Al igual que en los adultos, se deben realizar 30 compresiones y dos insuflaciones y repetir el ciclo hasta la llegada de los sanitarios.
