¿Alguna vez te has preguntado cómo llegan a tu casa los productos que has comprado por Internet? La logística y el transporte internacional son muy importantes en las expediciones comerciales mundiales. Inciden en los precios, en el trayecto entre países y en el medio ambiente. El objetivo final de todo el proceso es conseguir buenos resultados financieros y optimizar los tiempos de entrega.
A continuación te contamos todas las fases que sigue el transporte internacional para traer mercancías a un país. Si quieres dedicarte al mundo de la logística y transporte, echa un vistazo al Máster en Transporte de Larga Distancia. ¡Vamos allá!
Tipos de transporte internacional
En primer lugar debes saber que existen distintos tipos de transporte. Algunos se diferencian por el precio, rapidez de envío o tipo de mercancías que pueden llevar. Así pues, los principales medios de transporte utilizados son:
- Marítimo. Es el más utilizado. Se diferencian dos grandes especializaciones: transporte de carga fraccionada y de carga masiva.
- Terrestre. Se caracteriza por ser rápido, directo y económico. Puede transportar cargas completas o agrupadas.
- Aéreo. Es el medio más caro pero su ventaja es la rapidez. Las mercancías están limitadas por tamaño y peso.
- Ferroviario. Muy utilizado para envíos de larga distancia y cargas muy pesadas. La desventaja es la larga duración del trayecto.
- Modal. Consiste en utilizar uno o más medios. Su principal ventaja es la disminución de costes y la duración del trayecto.
Estos medios pueden transportar distintos tipos de mercancías: peligrosas, perecederas, de animales vivos, de consolidación o agrupadas.
Qué proceso sigue el transporte internacional
En todo tipo de transporte internacional de mercancías existe un proceso logístico desde el país de origen hasta el de destino. Así pues, aquí te contamos las fases paso a paso:
Preparar y asegurar el producto
La primera fase consiste en embalar y colocar correctamente la mercancía para minimizar daños en el trayecto. Cabe destacar que los embalajes deben ser accesibles para posibles inspecciones en aduanas. Después, es necesario que la empresa exportadora proteja los productos a través de la contratación de un seguro. Esto servirá en caso de pérdida o daños.
Trayecto hasta el punto de salida
La mercancía preparada sale de las instalaciones hasta el punto de salida del país de origen. Este trayecto suele realizarse por carretera para reducir costes y acelerar el proceso.
Llegada a la aduana del país de origen
Es momento de hacer los trámites y gestiones administrativas necesarias. Los agentes de aduanas autorizarán el envío si las mercancías y documentación están correctas y cumplen con la normativa.
Viaje hasta el país de destino
En esta fase, las mercancías autorizadas viajan al país de destino a través del medio de transporte escogido. Las condiciones en que son transportados los productos se habrán aclarado previamente en un contrato entre el exportador y la empresa transportista.
Llegada a la aduana del país de destino
Cuando la mercancía llega al país de destino, se descarga y es supervisada por la agencia de aduanas. La documentación también se comprueba. Cabe mencionar que existe la posibilidad que los productos sean verificados físicamente.
En este proceso hay que tener en cuenta la reglamentación de cada país. Si falta algún documento o existen irregularidades en la mercancía o en proceso de transporte, es posible que los productos queden paralizados en la aduana. Para ello se deberá pagar los impuestos que dicte la ley del país.
Trayecto hasta el punto de recepción
Una vez validada la mercancía será trasladada hasta las instalaciones del importador. Al igual que en el país de origen, el producto será transportado por carretera.
Recepción de las mercancías
La última fase del proceso consiste en descargar los productos y hacer la entrega a la persona o empresa receptora.