Ante una crisis sanitaria como la que estamos viviendo, es imprescindible contar con equipos de protección individual que sean eficaces y eviten el contagio del virus. En este post os contaremos qué tipos de equipos usan en sanidad y su función contra el covid-19. No te lo pierdas y sigue leyendo. Además, si estás interesado en el ámbito sanitario, echa un vistazo a nuestro Máster en Prevención de Riesgos Laborales en Transporte Sanitario. ¡No te arrepentirás!
¿Qué son los Equipos de Protección Individual?
Según el Real Decreto 1407/1992, un equipo de protección individual o más conocido como EPI, es cualquier dispositivo o medio que vaya a llevar o del que vaya a disponer una persona, con el objetivo de que la proteja contra uno o varios riesgos que puedan amenazar su salud y su seguridad.
Características
Estos EPIS se deben elegir con el objetivo de garantizar la máxima protección intentando que la molestia sea la mínima posible. Es por ello que debe escogerse la talla, diseño y tamaño adecuado. También es importante que la colocación y la retirada sea correcta para evitar que el agente biológico causante del virus pueda entrar en cualquier cavidad y así contagiar.
Generalmente recomiendan que estos equipos sean desechables, aunque si no es posible, se tienen que desinfectar tras su uso.
Tipos de Equipos de Protección Individual Sanitarios
Dentro de este tipo de equipos, encontramos aquellos elementos de protección respiratoria, ocular y facial. También se usan otros tipos de Productos Sanitarios que ayudan a la prevención del contagio:
Guantes:
Estos guantes deben ser de examen, no estériles y de un solo uso. Si se han de poner en contacto con fluidos de pacientes, se tienen que utilizar dos. En el caso de que estén contaminados ya sea por sangre o fluidos corporales, se tendrán que desechar en el momento. Una vez tirados es necesario una correcta limpieza de las manos para reducir el riesgo de contagio.
Ropa de protección:
Gracias a este equipo se protege a la persona de las posibles salpicaduras de fluidos y secreciones. Las ropas deben ser herméticas y resistentes a la penetración de microorganismos. También es recurrente la utilización de otro tipo de ropa como delantales químicos. Es recomendable que este tipo de ropa de protección sea desechable ya que, junto a ella, se eliminan focos de posible contagio.
Protección ocular
En el caso que haya riesgo de contaminación debido a salpicaduras y gotas, es imprescindible el uso de protección ocular. Dentro de esta tipología, podemos encontrar gafas integrales, o pantallas faciales. También pueden utilizarse otro tipo de gafas con protección lateral para evitar el contacto con manos o guantes contaminadas. Si se tienen que utilizar aerosoles, es recomendable su utilización.
Cómo hemos visto en este post, los EPIS son fundamentales para la protección contra esta epidemia, sobre todo para aquellas personas que están expuestas directamente al virus. Una correcta utilización es clave para ello. Por eso es importante que si se utilizan varios equipos de protección, se combinen de tal manera que no condicione la protección de cada uno.